Cuando Adolfo me pidió que os contara qué es la Transformación Digital sentí la petición como un honor y a la vez como un reto, porque aunque parezca lo contrario no es sencillo de explicar. No es sencillo porque es un término tan de moda y manido que ha perdido su sentido.
Para empezar quisiera resaltar lo que no es. La Transformación Digital no es Tecnología. La transformación digital no es un Proceso ni tampoco es hacer de forma digital procesos manuales.
La transformación digital sois vosotros. La transformación digital es la habilidad que tienen las empresas para motivar a sus empleados mediante retos, la capacidad de empoderarlos mediante la delegación de las decisiones, agilidad y tecnología, la tolerancia al fallo y la flexibilidad para reaccionar de forma rápida ante los cambios del mercado. Es todo esto sin perder de vista la generación de valor para nuestros clientes.
Datos y Algoritmos
La Transformación Digital es Datos y lo que somos capaces de hacer con ellos. Seguro que a todos se os viene a la cabeza términos como Inteligencia Artificial, Machine Learning, Deep Learning, R, Python, Fuzzy,… y seguro que habéis leído que son la solución a todos nuestros problemas. Y en cierta forma es verdad, pero lo que muchos no saben es que los algoritmos que hoy se usan se crearon hace 30 o 40 años, la diferencia básica para que hoy permitan hacer cosas que antes eran impensables es capacidad de computación y volumen de datos. Tecnologías como IoT permiten obtener un cantidad enorme de datos a precios infinitamente menores que hace 30 años. Porque hace 30 años esta tecnología ya existía en las refinerías como las de Cepsa, pero era cara, y las capacidades que teníamos para almacenar datos era mucho menor. Además la computación no permitía obtener resultados rápidos, se tardaba un día en procesar algo que hoy se hace en tiempo real.
“La Transformación Digital es la habilidad que tienen las empresas para motivar a sus empleados mediante retos, la capacidad de empoderarlos mediante la delegación de las decisiones, agilidad y tecnología, la tolerancia al fallo y la flexibilidad para reaccionar de forma rápida ante los cambios del mercado”
He querido ilustrar este artículo con una foto de una persona con una monopatín eléctrico que fue tomada en 1916. Esto lo hago para recordaros que la tecnología no es importante que lo importante es el uso que hacemos de ella. Que lo importante es el momento. El mercado no siempre está listo para la última innovación y por tanto siempre tenemos que tener en cuenta la conveniencia de todo lo que hacemos.
Hay muchos ejemplos de lo que son capaces de hacer estar tecnologías, desde el modelado mediante algoritmos de machine learning para prever el fallo de un motor, hasta la detección de corrosiones mediante el análisis de imágenes con IA. La tecnología esta ahí fuera esperando que la usemos para resolver retos de nuestra empresa que a su vez resuelvan problemas de nuestros clientes
Agile
Otra moda! ahora todo el mundo habla de Agile, de Scrum, de Kanban, Design Thinking, Growth Hacking,… Y es curioso que ocurre lo mismo que con la tecnología. Scrum, metodología para el desarrollo ágil de proyecto de software, que tienes sus orígenes en los años 80 y que se formalizó como metodología en el año 95… hoy en día es la más aceptada por las grandes empresas para “agilizar” la forma en la que trabajan.
Sea o no una moda, tiene varios conceptos claves para entender como deberíamos trabajar hoy en día. El primero es la agilidad, no entendida como hacer las cosas más rápida sino de forma flexible. Y el segundo es la gestión visual del trabajo, que permite a todos los componentes del equipo visualizar el trabajo en marcha (WIP) y detectar bloqueos, duplicidades, conexiones,… Hoy en día las organizaciones se enfrentan a los llamadas entornos VUCA (Volatility, Uncertainly, Complexity, Ambiguity), donde todo es volátil, incierto, complejo y ambiguo. Es por ello que necesitas tener una método donde puedas trabajar sin alcance definido, con tiempo de paso a producción muy cortos, y con iteraciones continuas de tu producto.
Por tanto, y para ir acabando, la transformación digital no es más que ponerle cordura a este mundo loco que nos atropella, nos exige cada día más y nos hace muchas veces olvidar el motivo por el cual vamos a trabajar todos los días. La TD debe volver a poner al empleado en centro porque si hacemos esto estamos enfocándonos a nuestros clientes (empleado feliz, cliente feliz). Debe eliminar burocracia aportando sentido común, reduciendo la complejidad de los procesos internos eliminando, como dicen los japoneses, la muda, los desperdicios, todo aquello que no tenga como fin aportar valor al cliente. Debe poner a disposición del empleado la tecnología adecuada para reto para permitirle tener “superpoderes” para hacer su trabajo.
La Transformación no es tecnología, es personas.
Miguel Ángel González Doval
Head of Digital Strategy CEPSA
Twitter: @maglezdoval
http://www.itilital.com